jueves, 28 de septiembre de 2006

Apuntes

Apuntes. De José Martí.

"Más, ¡cuánto trabajo cuesta hallarse a sí mismo! El hombre, apenas entra en el goce de la razón que desde su cuna le oscurecen, tiene que deshacerse para entrar verdaderamente en sí. Es un braceo hercúleo contra los obstáculos que le alza al paso su propia naturaleza y los que amontonan las ideas convencionales de que es, en hora menguada, y por impío consejo, y arrogancia culpable, --alimentada. No hay más difícil faena que esta de distinguir en nuestra existencia la vida pegadiza y postadquirida, de la espontánea y prenatural; lo que viene con el hombre, de lo que le añaden con sus lecciones, legados y ordenanzas, los que antes de él han venido. So pretexto de completar el ser humano, lo interrumpen. No bien nace, ya están en pie, junto a su cuna con grandes y fuertes vendas preparadas en las manos, las filosofías, las religiones, las pasiones de los padres, los sistemas políticos. Y lo atan; y lo enfajan; y el hombre es ya, por toda su vida en la tierra, un caballo embridado. Así es la tierra ahora una vasta morada de enmascarados. Se viene a la vida como cera, y el azar nos vacía en moldes prehechos. Las convenciones creadas deforman la existencia verdadera, y la verdadera vida viene a ser como corriente silenciosa que se desliza invisible bajo la vida aparente, no sentida a las veces por el mismo en quien hace su obra cauta, a la manera con que el Guadiana misterioso corre luengo camino calladamente por bajo de las tierras andaluzas. Asegurar el albedrío humano; dejar a los espíritus su seductora forma propia; no deslucir con la imposición de ajenos prejuicios las naturalezas vírgenes; ponerlas en aptitud de tomar por sí lo útil, sin ofuscarlas, ni impelerlas por una vía marcada. ¡He ahí el único modo de poblar la tierra de la generación vigorosa y creadora que le falta! Las redenciones han venido siendo teóricas y formales: es necesario que sean efectivas y esenciales. Ni la originalidad literaria cabe, ni la libertad política subsiste mientras no se asegure la libertad espiritual. El primer trabajo del hombre es reconquistarse. Urge devolver los hombres a sí mismos; urge sacarlos del mal gobierno de la convención que sofoca o envenena sus sentimientos, acelera el despertar de sus sentidos, y recarga su inteligencia con un caudal pernicioso, ajeno, frío y falso. Sólo la genuino es fructífero. Sólo la directo es poderoso. Lo que otro nos lega es como manjar recalentado. Toca a cada hombre reconstruir la vida: a poco que mire en sí, la reconstruye. Asesino alevoso, ingrato a Dios y enemigo de los hombres, es el que, so pretexto de dirigir a las generaciones nuevas, les enseña un cúmulo aislado y absoluto de doctrinas, y les predica al oído, antes que la dulce plática de amor, el evangelio bárbaro del odio. ¡Reo es de traición a la naturaleza el que impide, en una vía u otra, y en cualquiera vía, el libre uso, la aplicación directa y el espontáneo empleo de las facultades magníficas del hombre! ¡Entre ahora el bravo, el buen lancero, el ponderoso justador, el caballero de la libertad humana, -que es orden magna de caballería, -el que se viene derechamente, sin pujos de Valbuena ni rezagos de Ojeda, por la poesía épica de nuestros tiempos; el que movió al cielo las manos generosas en tono de plegaria y las sacó de la oración a modo de ánfora sonora, henchida de estrofas opulentas y vibrantes, acariciada de olímpicos reflejos! El poema está en el hombre, decidido a gustar todas las manzanas, a enjugar toda la savia del árbol del Paraíso y a trocar en hoguera confortante el fuego de que forjó Dios, en otro tiempo, la espada exterminadora! ¡El poema está en la naturaleza, madre de senos próvidos, esposa que jamás desama, oráculo que siempre responde, poeta de mil lenguas, maga que hace entender lo que no dice, consoladora que fortifica y embalsama!"

[José Martí. Prólogo a "El Poema del Niágara" de Juan Antonio Pérez Bonalde. Este trabajo se publicó en Nueva York, en 1882, y fue reproducido en la Revista de Cuba, tomo XIV, 1883. En Obras Completas. Editorial de Ciencias Sociales. La Habana, 1975. Tomo 7. Páginas 223 a 238.]

Para leer todo el trabajo, hacer clic [aquí]

lunes, 25 de septiembre de 2006

IV Encuentro Internacional de Cátedras Martianas en Caracas.

Escrito por Redacción
25.09.2006
Al evento asistirán los más importantes especialistas martianos del mundo. Será organizado por la Casa de Nuestra América José Martí, centro adscrito recientemente como proyecto estratégico a la Biblioteca Nacional. Paralelamente se realizará el VI Encuentro de Cátedras Martianas de Venezuela

En palabras del Prof. Sergio Briceño, Director Ejecutivo de la Casa de Nuestra América José Martí, Caracas se convertirá en la “capital martiana del mundo”, al reunir del 27 al 29 de septiembre de 2006 a 30 intelectuales, escritores y pensadores internacionales y 20 nacionales, que durante años han estudiado el pensamiento del prócer cubano José Martí, el libertador de Cuba, lo cual le da un alto relieve académico, investigativo e intelectual al evento. Es la primera vez que se hace en Venezuela a este nivel, de ahí su importancia histórica, política y científica.

Tras los encuentros realizados en la Ciudad de Panamá, Guadalajara, México y Puntarenas, Costa Rica, la realización de este IV Encuentro en Venezuela, fue acordada por unanimidad en este último país. Además, se llevará a cabo el Sexto Encuentro de Cátedras Martianas Venezolanas, dado que desde hace muchos años se venían realizando en varias universidades nacionales. “El Encuentro -señala Briceño- se propone ampliar los lazos entre las cátedras martianas de diferentes países e instituciones, lo innovador es que en esta oportunidad es convocado por la Casa Martí”.

Expertos de talla mundial

El director de la Casa Martí informó que la delegación cubana viene encabezada por el jefe del Programa Martiano del gobierno cubano, el Dr. Armando Hart Dávalos, político, ensayista y miembro del Consejo de Estado de la isla. Además de la Directora de Estudios Martianos de La Habana, Ana Sánchez Collazo y también el Dr. Pedro Pablo Rodríguez, Director de la Edición Crítica de las Obras Completas del prócer antillano y Director Científico del evento.

Por Venezuela participará el Presidente Honorario de la Casa Martí, el Dr. Ramón Losada Aldana, fundador de la Cátedra Martiana en la UCV, autor de varios estudios sobre el tema y de la edición crítica de la Revista Venezolana. Lo acompañará el Dr. Alberto Rodríguez Carucci, también Miembro de la Junta Directiva de la Casa y fundador de la Cátedra en la ULA y el Dr. Edmundo Aray, escritor y director de cine venezolano, entre otros. Estos especialistas cubanos y venezolanos estarán acompañados por colegas provenientes de México, Perú, Costa Rica, Panamá, Puerto Rico, Chile, España, Estados Unidos, Argentina y Francia.

El acto de instalación del encuentro se realizará este miércoles 27 de septiembre, a las 10:00 a.m, en el Hotel Ávila de la Urbanización San Bernardino de Caracas, lugar que concentrará todas las deliberaciones del evento. El encuentro es organizado por la Casa de Nuestra América José Martí, institución con sede en el Boulevard Panteón del centro capitalino, fundada hace dos años y adscrita recientemente, por instrucciones del Ministerio de la Cultura, como Proyecto Estratégico a la Biblioteca Nacional de Venezuela. La Casa tiene como Presidente al Prof. Arístides Medina Rubio, Director General de la BN.

sábado, 23 de septiembre de 2006

Efemérides Martiana

23 de septiembre de 1888

José Martí es nombrado socio corresponsal de la Academia de Ciencias y Bellas Artes de San Salvador.

jueves, 21 de septiembre de 2006

Se reúnen en Caracas estudiosos de José Martí.

Estudiosos de José Martí en Latinoamérica, Europa y Estados Unidos se reunirán en Venezuela del 27 al 29 de septiembre para analizar diversos aspectos de la obra del patriota e intelectual cubano.

Medio centenar de expertos de México, Venezuela, Cuba, Costa Rica, Panamá, Perú, Puerto Rico, Chile, Argentina, Estados Unidos y España participarán en el IV Encuentro Internacional de Cátedras Martianas y VI de las cátedras venezolanas.

El encuentro fue convocado por la Casa Nuestra América "José Martí" de Caracas, las cátedras martianas venezolanas y el Centro de Estudios Martianos de La Habana.

Fuentes del grupo organizador adelantaron a Prensa Latina que desde hace 115 años, cuando Martí vivió en Caracas, no se ha realizado un acontecimiento más relevante relacionado con el pensamiento del Libertador de Cuba y patriota latinoamericano.

Para el análisis se definieron seis ejes temáticos: Martí para y desde el III milenio, Martí en Venezuela, El periodismo martiano y La corriente del pensamiento independentista latinoamericano para una nueva corriente antiimperialista.

Asimismo, Símbolos y mitos latinoamericanos en la escritura de José Martí y Recepción y estudios de la obra martiana.

El principal objetivo del encuentro es promover el conocimiento de la obra martiana y ampliar los lazos de las cátedras, mediante debates en comisiones, mesas redondas, paneles, conferencias especiales y visitas a lugares de interés.

Los anteriores encuentros fueron realizados en Panamá, México y Costa Rica, centrados también en el estudio de la obra política, social y literaria de José Martí y en esta ocasión tendrá como lema "Por la dignidad plena del hombre, en defensa de la Humanidad".

La convocatoria indicó que en la reunión tienen cabida todas las disciplinas del saber, desde profesores universitarios hasta activistas de la lucha social que aporten a la corriente martiana sus experiencias y reflexiones.

Fuente: Prensa Latina

martes, 19 de septiembre de 2006

Investigador cubano habla sobre relación entre Eloy Alfaro, Martí y Maceo.

Regino Sánchez Landrián, especialista del Museo Fragua Martiana cuenta esta historia singular y poco explorada de la relación entre estos próceres de la independencia latinoamericana.

Por: Luis Hernández Serrano
Correo: digital@jrebelde.cip.cu
19 de septiembre de 2006 00:33:59 GMT
El prócer de Ecuador Eloy Alfaro Delgado sintió una particular inclinación hacia nuestra Patria desde que conoció la historia del joven ecuatoriano-cubano, al que Sucre, el Mariscal de Ayacucho, rindió póstrer tributo.

En ello basa el joven Regino Sánchez Landrián, especialista del Museo Fragua Martiana, de Ciudad de La Habana, la temprana gratitud que sintió el patriota ecuatoriano Eloy Alfaro Delgado por sus amigos Martí y Maceo, y por la independencia de Cuba.

«De ahí que en sus dos períodos consecutivos como Presidente ayudara al movimiento revolucionario de Cuba y de América Latina».

HOMENAJE DE SUCRE

«Influyeron mucho en él, de niño, las narraciones épicas que le contara su madre, María Natividad Delgado, en las noches de la localidad ecuatoriana de Montecristi, en la provincia de Manabí, su región natal.

«Un habanero ilustre, Francisco Calderón, emigró a Ecuador en 1780 y tuvo que ver después con aquel primer grito emancipador del 10 de agosto de 1809 en Latinoamérica. El hecho despertó en Eloy Alfaro sentimientos de admiración y gratitud que se incrementaron al saber que ese cubano era el padre del abanderado de la histórica Batalla de Pichincha: Abdón Calderón de Garaycoa».

Sánchez Landrián revela que Abdón nació en Cuenca, Ecuador, el 31 de mayo de 1804 y que murió el 25 de mayo de 1822, un día después de la batalla que condujo el mismo Sucre.

«Aquel joven cayó siendo oficial del Batallón de Yaguachi, perteneciente a las tropas del referido Mariscal. Con 17 años, escaló las faldas del Pichincha con el estandarte de la emancipación en sus manos, y cuando sintió la metralla enemiga en su pecho, les gritó a sus compañeros que siguieran avanzando con él para conquistar la cima del monte, fuerte plaza de los españoles y realistas».

Sucre enseguida dictó disposiciones oficiales como homenaje póstumo al temerario joven con genes de cubano y ecuatoriano:

«Para honrar debidamente la memoria de Abdón Calderón de Garaycoa, no se nombrará otro Capitán a la Primera Compañía del Batallón de Yaguachi. En lo sucesivo pasará revista el expresado Calderón como si estuviese vivo; y cuando en las de Comisario sea llamado por su nombre, toda la Compañía responderá: “Murió gloriosamente en Pichincha; pero vive en nuestros corazones”. A la madre de Calderón (Manuela de Garaycoa y Llaguno) se le pagará mensualmente el mismo sueldo de que hubiera disfrutado su hijo en la clase de Capitán, a que fue ascendido después de su muerte por su extraordinario valor. Mariscal Antonio José de Sucre».

ALFARO Y EL APÓSTOL

Nuestro entrevistado, licenciado en Historia en 2003 en la Universidad de La Habana, participó en el concurso ¿Qué sabe usted sobre Eloy Alfaro?, auspiciado por la Embajada de Ecuador en La Habana, la Oficina del Programa Martiano y el Comité Eloy Alfaro de Centro Habana, y obtuvo Primera Mención con su trabajo: Alfaro, en una vida, la historia de Ecuador.

«Lo primero que hallé fue la singular y poco explorada relación entre Alfaro y Martí. En la página 77 del libro De Paula 41 al Museo Casa Natal José Martí, de Mary Nieves Díaz Méndez, publicado en La Habana por la editorial Letras Cubanas en 1988, se dice:

«Jipi-japa legítimo obsequio del prócer ecuatoriano Eloy Alfaro a José Martí, como motivo del homenaje que le fuera ofrecido al Maestro por un grupo de amigos latinoamericanos, como el propio Alfaro, el colombiano José María Vargas Vila, el venezolano Juan Pérez Bonalde, el peruano Patricio Jimeno y otros en el afamado restaurante Delmónico, de Nueva York, en 1894».

Aclara Regino que ahí al menos hay una imprecisión. El onomástico 41 del Apóstol ese año 1894 no se celebró allí, sino en la casa de huéspedes de Carmen Miyares, sita en 57 Street, entre 8va. y 9na. avenidas, Nueva York.

«Por otra parte aunque el Maestro celebró su último cumpleaños —el 42— en el reservado del restaurante Delmónico, en enero de 1895, los participantes en esa ocasión fueron Gonzalo de Quesada y Aróstegui, Rodolfo Luis Miranda, Ramón Luis Miranda, Gustavo Govín y el propio Martí».

¿PACTO SECRETO?

Comenta el joven investigador que estos detalles los tomó de la sesión de la Academia de Historia de Cuba efectuada el 28 de enero de 1959, en La Habana. El doctor Gonzalo de Quesada y Miranda pronunció un discurso llamado Los natales de Martí, que esclarece estos aspectos.

«En los más de 20 libros que consulté, la relación Alfaro-Martí se ha abordado solo como contactos amistosos y protocolares, sin fecha ni lugares concretos. En Cuba el historiador que más trabajó la personalidad de Alfaro fue Emeterio Santovenia, pero no precisó nada al respecto, solo que ambos se habían encontrado en 1890 y 1891.

«Indagué en muchas obras sobre Alfaro, hasta llegar a su biógrafo más completo: Alfredo Pareja Diezcanseco, también ecuatoriano. Su libro La hoguera bárbara, publicada por la Nueva Editora, Casa de la Cultura ecuatoriana, Quito, 1986, tampoco dice cómo se conocieron ambos pensadores, ni en qué circunstancias».

Enfatiza Sánchez Landrián que Alfaro fue encarcelado, asesinado a balazos en su celda, sacado, arrastrado por las calles de Quito, descuartizado y quemado, de ahí el título de La hoguera bárbara.

De los contemporáneos, el joven museólogo consultó la Tesis Doctoral de Enrique Ayala Mora, prestigioso intelectual de Ecuador que trabajó la revolución liberal ecuatoriana, donde Alfaro es el centro. Otros autores como Malcolm Deas y Hernán Malo, ambos de Ecuador, hablan de la influencia de Martí en Alfaro, sin explicar por qué ni cómo.

«Tuve la suerte de encontrar una carta escrita el 22 de octubre de 1902, del mismo Alfaro a José Peralta, ecuatoriano residente en Perú a principios del siglo XX, comentando cómo había conocido a José Martí.

Fue a través de Bartolomé Mitre, director de La Nación, de Buenos Aires, quien le envió con Alfaro el pago a Martí por sus colaboraciones.

«El 24 de octubre de 1890, en la casa de huéspedes de Carmen Miyares, conoció a Martí y le entregó el importe con la carta con que Mitre los presentó a los dos. Así comenzó la fecunda amistad que cultivaron en numerosos encuentros y diálogos. Alfaro le obsequió el primer sombrero de jipi-japa. El otro se lo dio en 1894.

«Ambos se encontraron también entre los días 7 y 10 de junio de ese año en San José, Costa Rica. Martí fue con Panchito Gómez Toro, según asegura Pareja Diezcanseco, en la página 182 de la obra citada.

«El día 11 de junio se vieron de nuevo, en unión de Panchito Gómez, en la casa que ocupaba Alfaro, antigua residencia de su madre, María Natividad Delgado, en Alajuela, localidad de unos
4 000 habitantes, según censo de la época».

Todo lo anterior, unido a la relación Maceo-Alfaro, y Alfaro-Máximo Gómez, le hace suponer a Regino Sánchez que existió un pacto secreto entre esos luchadores, incluido Martí, para la independencia de Cuba y, además, para la refundación de Ecuador.

«Un ejemplo de esto es la carta que Maceo le envía a Alfaro desde Tapia, Pinar del Río, el 12 de junio de 1896, en la que le expresa su complacencia ante la noticia de que este había cumplido lo que le tenía ofrecido en cuanto a colaborar con la causa cubana.

«Además, Alfaro, a fines de 1895, se atrevió a escribirle una carta a la Reina Regenta de España para que concediera la independencia de Cuba. Ese mismo año organizó una expedición que desde Ecuador vendría a la Isla bajo las órdenes del comandante ecuatoriano León Valle Franco, intento que se frustró por la negativa del gobierno colombiano a que cruzase por su territorio».

En el Congreso Americano que propuso Alfaro para efectuarse en México, en agosto de 1896, uno de los temas fue la necesidad de la Independencia de Cuba. Igualmente brindó gran ayuda al representante del Partido Revolucionario Cubano, Arístides Agüero, y al emigrado cubano Miguel Alburquerque.

«Desde la década de 1890 hay un grupo de latinoamericanos comprometidos con refundar también la Gran Colombia Bolivariana. Se inspiraron en el proyecto del colombiano José María Torres Caicedo, al que Martí conoció mediante Vargas Vila, pero esta vez desde el Río Bravo hasta el Amazonas. Entre ellos aparecen los firmantes del Pacto de Amapala: Santos Zelaya (nicaragüense); Joaquín Crespo (venezolano); Benjamín Herrera (colombiano), y por supuesto Eloy Alfaro y José Martí, este último como ideólogo y gestor de esa suerte de propósito secreto.

«El ecuatoriano Enrique Ayala Mora, en la página 81 de su libro Historia de la Revolución Liberal Ecuatoriana, de 1994, dice: “(...) para él —alude a Alfaro— como para muchos líderes liberales de su época, debía formarse una especie de internacional revolucionaria de América Latina destinada a la coordinación de esfuerzos y al auxilio mutuo”. Se conoce que entre varios dirigentes se suscribió este pacto que justamente tenía ese objetivo. Los hechos posteriores probaron que la solidaridad existía».

Y añade Regino: «Gustavo Humberto Rodríguez R. en la página 109 de su obra Benjamín Herrera en la guerra y la paz, Editorial Ciencia y Derecho, Bogotá, 1994, dijo que era un anhelado proyecto que antes, en 1895, había esbozado el presidente ecuatoriano, General Alfaro, quien tampoco logró sacarlo adelante, a pesar de que entonces, en 1897, contó con el apoyo de los liberales de los países grancolombianos».

domingo, 17 de septiembre de 2006

Y NACIO UN POEMA.

Diario Las Americas
Publicado el 09-16-2006
POR LUIS MARIO

Las tres grandes obras poéticas de José Martí son el Ismaelillo libro dedicado a su hijo pequeño; Los Versos libres y los Versos sencillos. Pero hay también muchos poemas escritos en diversas ocasiones, en el ir y venir del primero de los patriotas cubanos, entre los que permanece una bella selección de versos dotados de un fino erotismo. “Guantes azules” es una de esas páginas martianas que se apartan de su propia y uniforme tradición. Son tres estrofas que siguen una misma configuración rítmica, pero la primera usa la rima asonante, la segunda es completamente sin rima -versos libres, como se decía entonces-, y la tercera está escrita con rimas consonantes.

Son cambios osados porque pertenecen al Siglo XIX, que estuvo tocado por cierta rigidez romántica en la confección estrófica, no así en la improvisación desbordante. Pero, tecnicismo aparte, resalta en esta obra la descripción surrealista de una alcoba matrimonial, la incitación, que es requiebro amoroso y la plenitud de la entrega en una imagen elíptica que cierra el poema.

Después del contacto de la abeja con la rosa, nada más puede decirse. Y el hombre enamorado calla. Si Martí es un escritor que a manos llenas reparte originalidades, es también un poeta del que fluyen las sorpresas. Y fluyen incontenibles, que es lo esencial.

Guantes azules. Por José Martí

I

Se me ha entrado por el alma
una banda de palomas:
me ha crecido y sale afuera
un rosal lleno de rosas.
Una luna apacible se levanta
sobre un campo poblado por las tórtolas:
un guerrero gigante resplandece
de pie, cual fuste de oro, entre las momias;
me parece que sube por el cielo
la madreselva que tu cuarto aroma.

II

Calla, apaga la luz, deja que suba
el vapor de la tierra, y se levante
en la sombra el amor de nuestra almas:
caerán las cosas; dormirá la vida;
sólo tú y yo, gigantes desposados,
nos erguiremos de la tierra al cielo:
coronarán tu frente las estrellas:
de los astros sin luz te haré un anillo.

III

Yo llevo en las desdichas aprendida
una ciencia callada,
que reposa, como una puñalada,
en las entrañas mismas de mi vida.
Yo sé de la parcial sabiduría
con que el hombre se nutre y se aconseja;
pero yo no sabía
lo que sabe la rosa de la abeja.

Publican ensayo sobre el cuñado cienfueguero de José Martí.

La investigadora cienfueguera Mirtha Luisa aclara que el joven Fortún colaboró con las luchas por la independencia cubana.

Por: Julio Martínez Molina
Correo Digital: digital@jrebelde.cip.cu
17 de septiembre de 2006 03:09:21 GMT

CIENFUEGOS.— La investigadora sureña Mirtha Luisa Acevedo, especializada en el estudio de Martí y de los vínculos de su familia con esta ciudad, acaba de publicar un ensayo reivindicatorio del cuñado del Apóstol: el cienfueguero Joaquín Fortún y André, esposo de su hermana menor Antonia.

«Pese a que se registran muy pocos datos en torno a este hombre, todo indica que fue víctima de calumnias que lo vincularon con el autonomismo, lo cual merece esclarecimiento», consigna Acevedo en el texto titulado El cuñado cienfueguero de Martí.

Con 21 años de edad, el 12 de octubre de 1885, Antonia contrajo matrimonio con Joaquín Fortún y André, según acta registrada en el Libro 7, Folio 335, No. 514 en la Iglesia de Nuestra Señora de Monserrate, en La Habana.

El joven Fortún y André había nacido en Cienfuegos el 6 de febrero de 1863, tal cual consta en Libro 11, Folio 99, en la Parroquia de la Purísima Concepción, de esta ciudad.

La investigadora despeja dudas al aclarar que fue descendiente de una familia ligada a las luchas independentistas desde fecha temprana. Y que él mismo intervino en la guerra necesaria recaudando fondos y pertrechos bélicos para nuestra causa.

Su padre Joaquín Fortún y Govín, participante en las contiendas de independencia, era administrador de la vía férrea Cruces-Santa Clara, donde realizó un importante proyecto para una escuela de Agricultura en Cruces, presentó planos, proporcionó terrenos y adjudicó una mensualidad para el sostén de la misma.

Su hijo Joaquín realizó estudios de Comercio en el Spring Hill College, de Alabama, Estados Unidos. Se graduó en 1880, tras lo cual regresó a Cuba para fijar su residencia en La Habana.

Tiempo después el cienfueguero desposó a Antonia Bruna Martí y Pérez, y de ese modo unió su temprana educación patriótica al vínculo familiar martiano, dice la estudiosa.

Hay referencias que ofrecen la opinión de Martí ante tal relación. En carta a Manuel Mercado, de marzo de 1887, opina: «el marido de la linda Antonia es un joven simpático y entusiasta, lo que me hace quererlo…».

Más tarde, en diciembre de ese mismo año, señala: «Antonia ya dueña de casa y madre». Ya había nacido el tercer Joaquín de la saga Fortún (La Habana 1886-1913), aunque más tarde vendrían Ernesto (La Habana 1888-1914), María (¿Matanzas?-México 1977), Carlos (¿Matanzas?-México 1977), la que constituye la familia Fortún-Martí.

Antonia falleció el 9 de febrero de 1900. Apesadumbrado, Joaquín Fortún André se trasladó a México con sus hijos, y allí falleció el 4 de mayo de 1944, recuerda Mirtha.

Antes de este ensayo Mirtha Luisa, miembro de la Sociedad José Martí y de la UNEAC, publicó el año anterior otro texto relacionado con los estrechos lazos de la esposa de Martí con Cienfuegos, opinión también recogida por este diario.

Efemérides Martiana

17 de Septiembre de 1879

Es detenido en su casa por conspirar con Juan Gualberto Gómez y otros patriotas.

viernes, 15 de septiembre de 2006

Atrae visitantes famoso regalo a José Martí.

La Habana, 13 sep (PL) La almohadilla de olor que la célebre "niña de Guatemala" regaló a José Martí hace 129 años, atrae hoy a los visitantes en el museo Fragua Martiana, en esta capital.

El regalo -inmortalizado en los Versos Sencillos, del Héroe Nacional de Cuba- aparece situada hoy junto a su buró y la silla donde firmara la orden de alzamiento el 24 de febrero de 1895, reinicio de la última guerra independentista cubana en el siglo XIX.

"Aunque todas las reliquias del Apóstol poseen ternura, esta es la más tierna", comentó al rotativo Juventud Rebelde el profesor y museólogo Regino Sánchez Landrían.

La almohadilla es rectangular, mide 37,5 centímetros de largo, 25 de ancho, tres de grosor y pesa alrededor de una libra. Un cordón dorado cierra sus contornos y termina en cuatro lazos. Su tela, blanca y rosada, está bordada con ramas y flores.

Fue obsequiada al Apóstol -como también se conoce al cubano más universal- en noviembre de 1877 por María Josefa García Granados Savorio, hija del ex presidente de Guatemala general Miguel García Granados, español, y de la guatemalteca Cristina Savorio García.

La muchacha, de 17 años, era alumna de las clases de Composición impartidas por Martí, por entonces con 24 años, en la Academia de Niñas de Centro América.

Su relación se fortaleció cuando él y el padre de la joven jugaban ajedrez a menudo en su casa. Dieciséis años después Martí escribió en sus Versos Sencillos: "Ella dio al desmemoriado, / Una almohadilla de olor: / El volvió, volvió casado: / Ella se murió de amor".

El Maestro la guardó durante sus 15 años en Estados Unidos y después de su muerte la conservó la familia Mantilla-Miyares y más tarde Gonzalo de Quesada y Aróstegui.

La almohadilla luego pasó a poder de Quesada y Miranda, quien la exhibió por primera vez en el Museo Martí, que fundó en La Habana el 10 de noviembre de 1928, en Calzada del Cerro 534.

Actualmente se aprecia en la Fragua Martiana, creada el 28 de enero de 1952, en La Habana.

rc/izs

Recordando a José Martí

Sobre la Educación.

"... Si la educación de los hombres es la forma futura de los pueblos, la educación de la mujer garantiza y anuncia los hombres que de ella han de surgir. El ser se ha desenvuelto al calor del hogar, antes que una atribución del ser se desarrolle con el contacto de los libros. Estos reforman, no forman; y si las madres traen al hogar esa costumbre de servilismo, ese bien, -hallarse con la opresión, que en los pueblos esclavos y en las instituciones tiránicas se adquiere,- la educación del temor y la obediencia estorbará en los hijos la educación del cariño y del deber. De los sistemas opresores, no nacen más que hipócritas o déspotas."

[José Martí. Artículo en "Revista Universal". México, 13 de mayo de 1875. Obras Completas. Editorial de Ciencias Sociales. La Habana, 1975. Tomo 6. Página 201.]

Consultar: Pensamientos de José Martí sobre la Educación

Efemérides Martiana

15 de Septiembre de 1866

Se inscribe en la clase de dibujo elemental de la escuela de artes plásticas de San Alejandro.

15 de Septiembre de 1892

Llega a La Reforma, Montecristi, República Dominicana, donde se entrevista con el General Máximo Gómez, quien acepta la jefatura del ramo de la guerra.