jueves, 7 de junio de 2007

José Martí, entre Carmen y María.

Arique. Revista de Poesía
por Reinaldo Cedeño Pineda

Exploraciones sobre la hermosa relación entre el héroe nacional cubano, José Martí (1853-1895) y la niña María Mantilla/ Dos amores en las antípodas: Carmen Zayas Bazán y Carmen Miyares/ Las cartas de la ¿polémica?/ Declaraciones de las nietas de María Mantilla en el siglo XXI.

El 9 de abril de 1895, José Martí tiene un pie en suelo haitiano y otro a bordo del carguero alemán Nordstrand, presto a zarpar hacia costas cubanas. Las primeras palabras del Diario que la posteridad conocerá como “De Cabo Haitiano a Dos Ríos”, son notas de apremio, apenas una línea, como quien marca un destino.

Sin embargo, ese propio día, escribe a María Mantilla una de las cartas más tiernas que he leído jamás, y más aleccionadoras. Con toda justeza ha sido considerada como su “Testamento íntimo”. Habla un padrazo:

Y mi hijita ¿qué hace allá en el Norte, tan lejos? ¿Piensa en la verdad del mundo (…) -en saber, para poder querer- (…) ¿se sienta amorosa junto a su madre triste? ¿se prepara a la vida, al trabajo virtuoso e independiente de la vida?

(…) Yo amo a mi hijita. Quien no la ame así no la ama: Amor es delicadeza, esperanza fina, merecimiento y respeto. ¿En qué piensa mi hijita? ¿Piensa en mí?

Para leer todo al artículo hacer clic [aquí]

No hay comentarios: