Por Martha Cabrales Arias
Santiago de Cuba, 24 sep (Prensa Latina)
Con el título José Martí, el Apóstol de Remanganaguas, circula hoy en Cuba y otros países un libro con interesante estudio acerca de las primeras horas tras la caída en combate de quien devino Héroe Nacional.
El periodista santiaguero Arnoldo Fernández, uno de los autores junto al profesor universitario Antonio Isaac Hechavarría, informó a Prensa Latina que la publicación estuvo a cargo de Alianza Proyecto Roque Libros y Piel Adentro Ediciones, en Hilversum, Países Bajos, y esta ciudad.
Indicó que esa investigación se inició en el 2004 e incluyó búsquedas en archivos de esta urbe y la de Palma Soriano, la prensa republicana, los censos de población, los títulos de propiedad, la documentación de las parroquias y la historiografía de estas demarcaciones.
Fernández exaltó que ese empeño confirma el valor de una metodología de estudio de la historia local, que construye el origen, el devenir y el ser de Remanganaguas, más allá del hecho histórico vinculado a los días del cadáver de Martí en ese cementerio.
Enfatizó en que demuestra también, con sólidos argumentos, la manera en que las familias del lugar se relacionaron con el suceso y legaron una memoria de esos momentos, además de conectar ese devenir local con el regional y nacional, desde diversas dimensiones.
El volumen ha tenido un amplio impacto en formato de papel en Estados Unidos, España y Holanda, puntualizó el escritor, quien aludió a la postergación de su presentación en Cuba a causa de la Covid-19.
Añadió que la Sociedad Cultural José Martí, el Movimiento Juvenil Martiano y las Uniones de Periodistas y de Escritores y Artistas de Cuba, junto a la Universidad de Oriente, auspiciarán esa ceremonia para dar luz al libro en el país.
Con prólogo de Jorge Camacho, de la University of South Carolina, Columbia, son 119 páginas que se dividen en 10 capítulos y tienen como colofón el testimonio gráfico.
Tras el deceso del Apóstol en Dos Ríos a manos de soldados españoles el 19 de mayo de 1895, sus restos fueron inhumados el día 20 en Remanganaguas para iniciar así un trayecto luctuoso que tras otros cuatro enterramientos finalizó en el cementerio de Santa Ifigenia en 1951.
ga/mca
Tomado de: Prensa Latina
No hay comentarios:
Publicar un comentario