Por: María Teresa Linares Savio (*)
(Fecha publicación:06/05/2006)
Los Cuadernos de trabajo de José Martí tienen datos interesantes.
Es otro libro de la vida con fichas de estudio 'con voces nacidas en América para denotar cosas propias de sus tierras', de las cuales seleccionamos algunas que cobran vigencia ahora que se atan nuevamente con América Latina los lazos políticos y culturales que harán un solo pueblo de los pueblos de Nuestra América y para lo que trabajó él incesantemente.
En estos cuadernos anota términos de música, bailes, alimentos, locuciones, de los que transcribimos algunos: Bandola: 'Tiple pequeño en Colombia'. Es el instrumento nacional por excelencia. Este instrumento se conoce también en Puerto Rico, Venezuela y Panamá. Nos ayuda a situar la localización y antigüedad del término.
Bambuco: 'Zamacueca, cueca, zapateado, jarabe'. Son bailes campesinos muy similares entre sí, de origen español.
Martí menciona las variantes colombiana, argentina, chilena, cubana y mexicana. Es término usado también como canción en Colombia y llegó a Cuba posiblemente al regreso de emigrados cubanos o en migraciones al principio del siglo XX. Gustó tanto a los trovadores cubanos que compusieron muchos bambucos Manuel Corona, Sindo Garay, Rosendo Ruiz y María Teresa Vera.
Canta: En Venezuela, 'es tonada. Canta llanera: la guacharaca'. También en los llanos colombianos utilizan el nombre guacharaca para el instrumento rallador, que se hace de un canuto de bambú con estrías, y dan el mismo nombre al canto que acompaña.
Cielito: 'La copla uruguaya, y el baile popular de que es parte principal el canto de ella'. Martí menciona cielitos también entre los gauchos. Hoy se considera un género campesino argentino que se canta con décimas, en proceso de extinción.
Furruco: En Venezuela, 'barril pequeño, con una cubierta de madera, y otra de cuero, atravesado por un palo delgado, que al subir y al bajar produce un ruido brusco, sordo, monótono y desagradable. Parece un agrandamiento de la zampoña'. La zampoña es un instrumento aragonés. En Brasil le llaman cuica. El principio fricativo con una varilla aparece también en el ecué abakuá y el kinfuiti bantú, instrumentos afrocubanos que se emplean aún en Cuba.
Nos inclinamos a pensar que, aunque con nombre evidentemente español, el instrumento venezolano mencionado se acerca más por su figura al kinfuiti, ya que en Venezuela hay mucha influencia africana. Fioli: En Venezuela, 'sarao de gente pobre. Ahí hay un fioli'. Se puede considerar como un guateque cubano.
Guacharaca: En Venezuela, 'canto mezclado de baile usado por los llaneros. Tóqueme una guacharaca. De guacharaca, esta ave tan sabrosa en comida y tan bullanguera'.
Galerón: En Colombia y Venezuela, 'cantar musicado de los llaneros, como las Rosas de Timoneda'. El galerón reúne varios pasos de baile, intercalando coplas y décimas. Es canto y baile de campesinos, de posible origen cubano, muy semejante a las tonadas de punto fijo de las zonas centrales de nuestra Isla.
Joropo: En Venezuela, 'zapateado variadísimo'. También el joropo tiene distintos pasos de baile y aún se usa en zonas suburbanas de Venezuela.
Pasillo: 'Baile popular en Colombia'. Similar al joropo.
Quena: 'La flauta del indio peruano'.
Resbalosa: 'El zapateado en Chile'. En la Argentina, 'tocar la resbalosa, era degollar, porque lo hacían al son de ella, y también porque resbalaba el cuchillo. Tocarle la resbalosa, mandarle a degollar. Hubo violín y violón (aludiendo al conjunto instrumental con que se ejecuta): degollar: frase de D. Mariano Meza'. ¿Serán éstas ceremonias de sacrificios de animales, que se hacían acompañadas de música?
Tiple: 'Guitarra corta de ocho cuerdas' (Colombia). Hoy se le llama cuatro, por tener cuatro cuerdas dobles, y se le conoce en Venezuela, México, Panamá y Puerto Rico. En Cuba se conservó el nombre hasta su extinción, sustituido por la bandurria o el laúd cubano.
Zambe: En Venezuela, 'especie de zapateo: zapateo y escobilla. Animadísimo y dificilísimo. El payaso Jn. González lo bailaba maravillosamente, con dos maracas pequeñas en la parte superior de los tarsos, sobre un tablado'. Este es un dato importante. Aunque es un zapateado, que casi todos son de origen español, el nombre es evidentemente bantú, y el atarse maraquitas en las muñecas es costumbre bantú en Cuba, entre los tocadores de tambor yuka y los tocadores de rumba columbia. Entre los paleros cubanos, es ritual comenzar un baile y canto diciendo: ¡Jura' dio sambé! Este baile pudiera estar relacionado con los bailes de paleros y de makuta.
También hubo campesinos que bailaban el zapateo como solistas virtuosos sobre un tablado en las bodegas de campo, en el poblado de Artemisa (localidad habanera).
Ziripá: En Santiago de Cuba, 'el zapateo'. Alejo Carpentier menciona este nombre como baile antiguo de negros.
El Diario de campaña es uno de los más fascinantes relatos entre los que José Martí muestra su asombro ante la naturaleza y la cultura del hombre.
Las principales dificultades que enfrentan en la guerra, son las enfermedades y el hambre. Veamos algunas fórmulas dietéticas remediales a la escasez que señala, en las que aparece el uso de las larvas de abeja como alimento fundamental: '[...] nos detenemos a ver derribar una palma a machetazos al pie para coger una colmena, que traen seca, y las celdas llenas de hijos blancos. Gómez hace traer miel, exprime en ellos los pichones y es leche muy rica [...]'. ¿Será que ya se conocía el valor del propóleo y de otros derivados de la miel?
Pan-patato: Rallaban el boniato crudo, lo mezclaban con calabaza, yuca u otra vianda, o coco rallado, y luego le echaban miel de abejas o azúcar y manteca, lo cocinaban en cacerolas de manteca rodeadas de calor. Servía para cuatro o seis días. Así aprovechaban el boniato malo. Costumbres familiares: 'El rancho es nuevo, y de adentro se oye la voz de la mambisa: 'Pasen sin pena. El café enseguida, con miel por dulce [...]. Va y viene ligera; le chispea la cara, de cada vuelta trae algo, más café, culantro de Castilla para que cuando tengan dolor al estómago por esos caminos, masquen un grano y tomen agua encima'.
Remedios caseros: 'En un grupo hablan de los remedios de la nube en los ojos: agua de sal, leche de ítamo, 'que le volvió la vista a un gallo''.
En dos ocasiones habla Martí del valor alimenticio de la miel, y del jugo de las larvas mezclado con ella. Nutre por todo un día y da fuerzas.
Y agrega más remedios: 'Vi hoy la yaguama, la hoja fénica que estanca la sangre, y con su mera sombra beneficia al herido'. Y necesitaban bosques de esta planta. 'Machuque bien las hojas y métalas en la herida; que la sangre se seca [...]. Las aves buscan su sombra'.
'Que la sabina, olorosa como el cedro, da sabor y eficacia medicinal al aguardiente'. 'Que el té de yagruma, de las hojas grandes de la yagruma, es bueno para el asma'. 'A César le dan agua de hojas de guanábana, que es pectoral bueno, y cocimiento grato'. 'Artigas, al acostarnos pone grasa de puerco sin sal sobre una hoja de tomate y me cubre la boca del nacido'. Y finaliza su diario: 'Está muy turbia el agua crecida del Contramaestre, y me trae alentín un jarro hervido en dulce, con hojas de higo'.
Sería mucho más amplio este artículo si ordenáramos todos los valiosos aportes que ofrecen las obras completas de José Martí, que enriquecen el conocimiento de la cultura popular y los aspectos de la antropología de los pueblos de América.
En su obra Martí no descuida los detalles que evidencien el estudio de la base económica, las artes, las costumbres, el ciclo de vida, lo que pudiera dar pie al estudio de las teorías etnológicas de la época, con la seguridad de que, además de político, poeta, crítico, literato, lingüista, tendríamos que considerarlo un pionero de la etnología.
(*) María Teresa Linares Savio es cubana, musicóloga, una de las más importantes estudiosas de la raíz africana en la cultura de Cuba.
1 comentario:
Amigos, les invito unas PAYAS para este 18. Salud!!
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