José Antonio Quintana García
junio 4, 2023
“Oyéndolo, se pensaba en la patria, en la libertad, en el bien“, dijo el colombiano del cubano.

Vargas Vila
El poeta venezolano Ramón Palacio Viso, secretario privado e hijo adoptivo de José María Vargas Vila (1860-1933), el escritor más leído en América Latina entre 1900 y 1950, tenía los derechos sobre las obras del colombiano y como editor publicó en 1938 el libro José Martí: apóstol, libertador
.
Palacio Viso, casado con una cubana y fallecido en 1953, en el asilo de Santovenia, de La Habana, acompañó a Vargas Vila durante 35 años y sabía de la devoción martiana del controvertido hombre de letras.
El texto que compiló incluye conferencias, artículos, comentarios, discursos, cartas y poemas. Carlos García-Prada, profesor de la Universidad de Washington, le dedicó una reseña en la Revista Iberoamericana, el 11 de noviembre de 1939:
“Siendo el panfletista colombiano —como Martí— un grande enamorado de la Libertad, y poseyendo, como posee, un tan erguido e independiente criterio para ver y juzgar las cosas y los hombres, el retrato que del Apóstol cubano nos da está hecho con simpatía y precisión. En frases de característica musicalidad y bizarría, Vargas Vila nos pinta a Martí, poeta sencillo, espontáneo, candoroso, directo y confidencial; a Martí, tribuno popular, generoso, inspirado, arrebatador; a Martí, creador de una Patria libre, consagrado a un ideal único y sublime; a Martí, hombre melancólico, sincero, inmaculado, amoroso; a Martí, el sacrificado, redentor y animador luminoso de conciencias; a Martí, figura imponente, de perfiles que cada día se realzan más y más en el nuevo mundo americano, idealista y democrático. Otros retratos de Martí serán quizás más comprensivos que el de Vargas Vila, pero es preciso conocer éste para tener una idea cabal del noble patriota cubano.“