José Martí, el alma de Patria

Abel Rosales Ginarte
4 de marzo de 2021

José Martí, el Apóstol por la independencia de Cuba, palpita en el espíritu de la isla que amó y nos enseña a quererla cada minuto de nuestras vidas. El 14 de marzo de 1892 nació el periódico Patria que él mismo definió: “Para juntar y amar, y para vivir en la pasión de la verdad, nace este periódico (…), a la hora del peligro, para velar por la libertad, a contribuir que sus fuerzas sean invencibles por la unión, y para evitar que el enemigo nos vuelva a vencer por nuestro desorden”. Esa evocación a la unidad mantiene vivas las raíces y resume el sueño martiano de una nación independiente y soberana. Por eso, en medio de las incertidumbres del último año, Martí nos ha seguido acompañando en los interminables recorridos a pesar de la COVID-19.

Cada minuto nos hemos preguntado, ¿qué diría Martí? La interrogante es más poderosa en tiempos en los que algunos tratan de desunir y desestabilizar. Cualquier cubano puede entender los nombres de los cinco candidatos vacunales cubanos contra la COVID-19, porque todos llevan un signo que nos identifica. Sentimos orgullo de que sean los primeros en la región. A veces hemos tenido que levantar los ojos de la página en blanco para despedir a un colega que no ha podido sobrevivir a la pandemia.

El Maestro continúa señalando el camino. Martí definió el papel de la prensa en la Revista Universal, de México, en 1875: “No es el oficio de la prensa periódica informar ligera y frívolamente sobre los hechos que acaecen, o censurarlos con mayor suma de afecto o de adhesión. Toca a la prensa encaminar, explicar, enseñar, guiar, dirigir, tócale examinar los conflictos, no irritarlos con un juicio apasionado, no encarnizarlos con un alarde de adhesión tal vez extemporáneo”.

En estos días difíciles de aislamiento y soledad, contar historias, encontrar a protagonistas y preparar materiales periodísticos con mejor factura es difícil, especialmente si es para la radio o la televisión. No alcanza el tiempo para musicalizar y editar con esmero. Aconsejo evocar las penurias terribles que enfrentó Martí para hacer realidad un partido, fundar un periódico y entregarse a una revolución. Cada jornada cuando toca buscar fuentes, contactar entrevistados o descubrir que solo nos quedan las palabras para informar, debemos pensar en Martí y repetir la misma interrogante ¿qué pensaría, si nos escuchara en la radio o leyera nuestros textos?

El Dr. Eusebio Leal, quien por varias décadas fue el historiador de La Habana, durante su intervención en el VII Congreso de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba en abril de 2008, resumió con elegancia nuestra misión en estos tiempos. “Cada día las noticias que nos llegan son alentadoras y no es cómo dicen nuestros mortales enemigos, un tema cosmético. Nosotros lo que tenemos es que luchar desde nuestras obras para que se laven las conciencias de todos los cubanos, para que todo el mundo sienta que tiene delante eso, precisamente, y que se cumplan aquellas palabras bellas de Martí cuando dijo: ¡Qué misterio dulcísimo tiene esa palabra: cubano!”.

Ciento veintinueve años después Martí, el alma de Patria, palpita en el espíritu de Cuba. Hoy, corresponde continuar estudiando, perfeccionar lo aprendido, porque el Maestro hace más de un siglo alertó: “De pensamiento es la guerra que se nos hace, ganémosla a pensamiento”.

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fny

Tomado de: Radio Ciudad de La Habana